sábado, 15 de febrero de 2014

Tormenta

Hoy mi día empezó a las 8 a.m. Hice un montón de cosas y entre ellas publiqué una cosa en facebook que causó un pequeño debate en el que no quise meterme a pesar de haberlo empezado indirectamente. La verdad, fue un tropezón con el cual empecé el día, así que nuevamente epecé lento en el trabajo, un poco desorientado con las mesas, desconcentrado. Pero eso es lo bueno del trabajo simple, con el rato empiezas a olvidarte de todo y a despejar la mente. Así que después de un rato dejé de cometer errores (en un punto se me cayó un cubierto encima de una señora porque llevaba muchas weas en las manos, ups) y todo empezó a funcionar como la máquina humana que es cada restaurant.
Todo iba bien en el restaurant, se veía que iba a ser un buen día, hasta que empezó a chispear y luego de un rato a llover. Ahí todos los clientes que estaban en las mesas de afuera se entraron y cerramos las dos terrazas. Eso significó el doble de meseros adentro y la mitad de los clientes en el restaurant. Bueno, en verdad es como un tercio, no la mitad. Pero la cosa es que todo se alivianó mucho (aunque la cocina estaba un poco lenta y salían todos los platos en rachas, por lo que a veces teníamos que sacar muchos platos a las mesas y otras meter muchos platos sucios a la cocina. Pero bueno, luego de entrar todos los cojines y tapar los sillones de mimbre con un toldo, nos dedicamos a la parte de adentro del restaurant por completo.
Como a eso de las cinco y media emecé a ayudar a la anfitriona a llevar clientes a las mesas desocupadas y justo cuando me toca llevar a los clientes que venían entrando me doy cuenta de que ¡son mis amigos! Venían el Titi, el Chris, el Rosh y su polola la Dachi, así con alegría los recibí y los llevé a su mesa. Después de un rato, como a las seis y un cuarto fui a cambiarme, a buscar mi reporte de la semana pasada ($8500), agarré mi plato de colación que nos dan a los empleados y me fui a sentar con ellos. Estos guatones se comieron las mansas nique hamburguesas, así que me dieron un poco y también papas. Y ya, terminamos de comer, ellos pagaron lo suyo y me dijeron que íbamos a ir al cine. Así que fuimos, compramos entradas para ver Robocop a las 9 y fuimos a dar una vuelta por el mall.


Ya cuando se acercó la hora de la película fuimos al cine y esperamos cómodamente en un sillón que estaba frente a la entrada de las salas. Empezó a llegar la gente y nos pusimos a la fila para entrar.
Para hacer el cuento corto, la verdad de las cosas la película no me gustó. No me aburrí, está bien hecha en términos de acción y drama, pero no me gustó la trama y mucho menos el final. Así que no la vean. Esa es mi recomendación.
Y bueno, eso fue mi día, llegué tarde a mi casa y ya debería irme a dormir, así que no hay historia por hoy, pero pronto, pronto.

Un abrazo a todos :3

Pato.

PD: 55 días y contando.

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